Durante la semana del 20 al 24 de julio de 2015, un equipo del Área de Zoología liderado por el curador de Zoología de Vertebrados, un voluntario y el apoyo de la empresa Chucao, trabajó en la ciudad de Iquique en la recuperación de los restos de un cachalote gigante (Physeter catodon) que fue enterrado hace varios años por SERNAPESCA a unos 20 kilómetros de la ciudad de Iquique. La importancia de esta actividad radica es que fue un trabajo que permitió recuperar un cráneo y su mandíbula en excelentes condiciones. Lo interesante es que este ejemplar está bien documentado por lo que su ingreso a nuestra colección representa un aporte significativo al aumento de las especies presentes en el Museo y que dentro de los próximos meses podrán estar disponibles para la investigación.

Si bien es cierto que los cachalotes varan con frecuencia a lo largo del país, este ejemplar además es valioso por el estado de conservación del cráneo y su mandíbula, ya que usualmente muchos de los restos que se encuentran en la costa están incompletos o dañados (usualmente se pierden los dientes y cráneo esta roto).

La recuperación del cráneo fue una operación en terreno de alta complejidad, ya que significó no sólo la remoción de un gran volumen de arena, sino que además un trabajo muy delicado de preparación en el mismo lugar para remover parte de los tejidos, así como el proceso de levantar el ejemplar que se encontraba enterrado a unos tres metros de profundidad. El factor peso (unos 300 kilos) sumado a la fragilidad de algunos elementos óseos del cráneo hacían que la tarea fuera altamente riesgosa. El proceso consistió en la recuperación, embalaje y posterior traslado a Santiago.

Cabe destacar que un trabajo de esta naturaleza no se realizaba por parte de nuestra Institución hace varias décadas y su desarrollo es producto del nuevo proceso de incremento de las colecciones del Museo que se enmarca dentro de su Plan Estratégico, permitiendo de esta forma mejorar la representación de las especies del país. Junto a este ejemplar se deben sumar cuatro ejemplares de otras especies de cetáceos menores: un cachalote enano, dos marsopas espinosas y una cría de delfín común. Todos estos especímenes vararon, en diferentes momentos, en la costa de Iquique y fueronrecuperados y congelados por SERNAPESCA. Posteriormente quedaron bajo la custodia de la Universidad Arturo Prat y el Centro de Rescate de la Municipalidad de Iquique. Todas estas instituciones fueron claves en el proceso para disponer de los ejemplares que hoy están el Museo, y evidencian la importancia de las redes de cooperación y la voluntad de incrementar el conocimiento.

Nuestra gratitud a todas las personas que nos apoyaron y las instituciones públicas y privadas. Esta iniciativa ha sido financiada a través de los Proyectos FAC (Fortalecimiento de la Actividad Curatorial) del Museo Nacional de Historia Natural.