Alguna vez se han preguntado cómo una momia llegó a convertirse en un monstruo más, quedando en la línea de personajes fantásticos como vampiros, hombres lobos y zombies. En primer lugar debemos saber que una momia es un cadáver ya sea animal o humano, al que se le han detenido los procesos de descomposición natural y sus tejidos blandos se han preservado gracias a la desecación, este proceso puede ser natural (por ejemplo en desiertos) o artificial, este último es el caso de las momias egipcias, que a través del proceso de embalsamado realizado a los cuerpos presentan una extraordinaria conservación.

Muchos piensan que el origen de la monstruosidad de las momias egipcias se debe a la maldición que acarrea la profanación de su tumba, creencia ampliamente extendida a partir del descubrimiento de la tumba de Tutankamón (Neb-jeperu-Ra Tut-anj-Amón) por Howard Carter en 1922. Idea que cobra fuerza debido a la repentina muerte del mecenas de la expedición, Lord Carnarvon, algunos meses después de la apertura de la tumba por un extraño "envenenamiento de la sangre", que probablemente fuera septicemia que por la picadura de un mosquito.

Si bien la muerte de Carnarvon le dio popularidad a la idea de la Maldición de la momia, las leyendas sobre esto datan de más de un siglo antes de que Carter abriera la cámara de Tutankamón, como les narré en una nota anterior las ceremonias de desenfardar momias eran muy comunes en la Europa del siglo XIX, es así que en Londres en 1820 se desarrollaba un macabro espectáculo escénico, donde el público podía observar como los anfitriones quitaban una a una las vendas de lino de las momias e incluso le realizaban la autopsia. A partir de esto la escritora Louisa May Alcott, la misma autora de Mujercitas, escribió un breve cuento titulado Lost in a Pyramid, llamado también la maldición de la Momia publicadoen 1869. En él narra la historia de una expedición a Egipto donde los profesores Niles y Forsyth profanan y lanzan al fuego el cuerpo momificado de una mujer hallada al interior de la pirámide de Keops, además Forsyth se lleva consigo como recuerdo unas extrañas semillas escarlatas obtenidas de la tumba, que le acarrearán desdicha y mala fortuna, no contaré más por si se atreven a leer la historia.

De todas formas la idea de la maldición no fue creada solo a partir de la imagen occidental que se tenía de una cultura "pagana y enigmática" como la del Egipto antiguo, esta también se debe a las inscripciones de advertencia que según el egiptólogo Salima Ikram, de la Universidad Americana de El Cairo, se observan por ejemplo, en algunas paredes de la mastaba en Giza y Saqqara, las que tenían por objetivo mantener alejados a los saqueadores de tumbas, amenazando con una trágica muerte, a quienes se atrevieran a profanar las tumbas reales, despertando la furia de los dioses.

Obviamente que las historias de la maldición de la momia llamaron muchísimo la atención y se masificaron gracias a la prensa de la época luego de la muerte de Carnarvon, llegándose a contabilizar unas 50 muertes relacionadas en los medios a la maldición, sin embargo, la verdad es que solo 8 personas que estuvieron presentes en la apertura de la tumba de Tutankamon murieron en un plazo de 12 años y todas por causas naturales, el mismo Carter moriría 17 años después por la enfermedad de Hodgkin.

Finalmente fue el cine el que posicionó a las momias en la categoría de monstruos clásicos, la primera película titulada La Momia dirigida por Karl Freund y protagonizada por Boris Karloff en el personaje del sacerdote Imhotep, es una película de terror estadounidense de 1932, en donde el arqueólogo resucita la momia de Imhotep al leer un papiro del libro de los muertos. Lo que muchos no saben es que aquel papiro era una pieza original del antiguo Egipto prestada para la película por el British Museum.

Con o sin maldición, la momia es un ser que ha desafiado a la muerte, un cuerpo que ha triunfado frente a la inminente putrefacción y la acción de los agentes descomponedores, incorruptible ha sorteando todas las etapas de la muerte, llegando a nosotros como mudo testigo de lo que fue en vida. En la fantasía son inmortales entonces, cuerpos suspendidos en el tiempo esperando su momento para volver a la vida y cobrar venganza, el cine logró lo que los egipcios solo soñaron, resucitar a la momia y que esta caminara otra vez entre nosotros. Por nuestra parte como científicos buscamos hacerlas hablar y esta vez, a través de análisis no destructivos, desentrañar sus secretos.