El folclore, como elemento de la expresión cultural, es fiel reflejo de los saberes y quehaceres de cada grupo humano. En vísperas de fiestas patrias afloran los sentimientos por el terruño, que se hacen presentes en el verso espontáneo, incluso en aquellos que profesamos la ciencia.

Los animales, y entre ellos los insectos, no han estado ausentes en el discurso del pueblo. Para bien o para mal, asociados al mito o a la realidad, estas pequeñas criaturas también tienen su espacio en el canto popular.

A continuación dejo unas cuartetas, para deleite del lector, esperar réplica no es la meta, pero si la responde mucho mejor.

Brindo dijo el palote,

por la hojita y por la rama,

yo no pico, no me azote,

no merezco mala fama.

El néctar chupa la mariposa

del rosal y la clavelina

chupa néctar y no otra cosa,

no lo que usted imagina...

En lo alto de una rama,

cantando el macho de la chicharra,

a la espera de una dama

que si no canta no agarra...

También canta el grillo,

en el pasto y en la hierba,

y aunque no tiene mucho brillo,

igual encuentra a su pierna...

Te pico dijo la abejita,

pícame dijo el niñito,

pícame con lancetita,

pero no me piques el gusanito.

Vuelta y vuelta en la fonda bailaban

un par de arañas borrachas

cuecas y corridos danzaban,

todos los bailes, menos las guarachas...

También me gusta la chicha

dijo el mosco chichero,

pero más me gusta la dicha,

de decirte te quiero.

Entre el asado y el vino, ay sí,

busca la mosca a su pareja,

un mosco feo y bien cochino,

pero de eso no se queja.

De chupar sabe la vinchuca,

el jerjel y el coliguacho,

no se haga la pituca,

y mándese este cacho...

Atrás no se queda,

la chinche y el pulgón,

cuando darse cuenta ud. no pueda,

le darán un picotón.

Tomar chicha sabe la abeja,

con ella nadie se mete,

aunque del trabajo no se queja,

igual le da su sorbete.

Bailar guaracha quería la chinita,

dando saltos como el grillo,

con sus seis patas cortitas,

no le encuentro mucho brillo.

...la cueca insectil con seis patas se baila,

dijo gritando un zancudo trasnochao,

esperando que nadie lo aplauda,

pa' no quedar al comienzo aplastao...

Que en la paya meta un bicho,

eso no es coincidencia,

no lo hago por capricho,

sólo soy un huaso de ciencia.

Yo no soy capitalino,

en los versos palabras pongo,

soy un tanto ladino,

pero vengo de Chimbarongo.

Vengo de Chimbarongo, ay sí,

aunque no reconozca mi timbre,

a todos les rezongo,

que soy de la capital del mimbre.

Y con esta me despido,

y no me voy por el atajo,

muy entrete todo ha sido,

pero debo volver al trabajo...

:)

¡FELICES FIESTAS PARA TODOS!