Este es un libro en dos presentaciones, una de tapa blanda y otra en tapa dura, de 24 cm de alto, 17 de ancho, interior de papel couché opaco de 130 g/m2.

Diego parte haciendo un exhaustivo, extenso y muy sentido agradecimiento. El libro está prologado por el zoólogo Juan Carlos Torres-Mura, y se refiere a él como "… una fiesta para los ojos,…", agregando que no sólo hay erudición sino que la obra refleja el vigoroso entusiasmo del joven Diego. No tengo más que estar de acuerdo con Juan Carlos, ésta es una obra erudita y, sin duda, la más magistral obra gráfica acerca de los reptiles de Chile editada hasta ahora y, ciertamente, por mucho tiempo más.

Indudablemente uno puede no estar de acuerdo con las opiniones de Demangel respecto de la taxonomía, nomenclatura o la existencia de algunas especies, pero eso no resta en absoluto el valor de la obra, Diego es franco y directo: "esto es lo que pienso" y lo expone, lo señala y, principalmente, lo ilustra. Y esa es su propuesta, discutible, controvertida a veces, pero completamente respetable. No se quiera desprender de mis observaciones que es sólo un "lindo libro de ilustraciones"; en las propuesta de Demangel, hay un asombroso cúmulo de observaciones, profundamente documentadas, (tiene más 560 referencias bibliográficas desde la página 598 a la 612).

La presentación de los contenidos herpetológicos es en orden alfabético de los géneros, sumergiendo al lector en una copiosa cantidad de magníficas fotografías, cada una de ellas un arte gráfico, útil para quienes vivimos de los detalles de estos animales, la nitidez de las fotografías es a lo menos asombrosa, provocando mi enconada envidia, que a mis fotos las califico de "documentales" (elegante para decir que es una foto "ahí no más"), estas fotos de Diego reflejan no sólo a un biólogo dedicado y algo audaz en sus asertos, también muestran a un ser humano con profundo sentido estético, en que la imagen es una verdadera editorial de cada especie.

Hay aspectos en lo que no estoy de acuerdo, la descripción de especies nuevas en un texto de esta naturaleza no es lo más conveniente, existen precedentes de esto, Roberto Donoso Barros en su famoso libro monográfico de 1966, Ramírez y Pincheira-Donoso en 2005, la descripción de especies está protocolizada actualmente y debe ser en una revista seriada, lo que acá no sucede. Sin embargo, Diego procede de manera audaz como he señalado.

Finalmente, Diego, hace referencias a "notas taxonómicas", son cortos a medianamente largos comentarios acerca de determinados grupos de reptiles. Son datos útiles.

Quisiera poder guardar prudente distancia de la condescendencia amable para este libro, y no hacer de este comentario una elegía del mismo, me es difícil, los largos años que tomó reunir tan asombrosa cantidad de imágenes ya es un tanto digno de considerar. Este libro, es un hito, lo será por mucho tiempo.